agosto 10, 2009

En resumen...

¿Qué hago aquí? Suspendida entre las redes de la inmortalidad y el funesto final de un breve suspiro, un barato eco que apenas es risible, imaginable, palpable.

La osadía de la vida que se ofrece por cinco nueces y un ritual comercial que se promueve global, virtual, cotidiano en demasía. Tan común y corriente a veces como las palabras vomitadas de una mente pueril que no tiene ojos ni existencia propia.

Es el camino de lo que no siempre tiene sentido, a pie descalzo las piedras arden más y le dan otro significado al desierto. Cosa curiosa, siempre hay una bruma nocturna para desesperanzar a la desolación en la cumbre de su porfiria.

No será la sublimidad de la palabra la que engulla la miseria que emana de las múltiples existencias, que en resumen no son nada sino montones hambrientos sin más voz ni motivación que programar sus vidas al son de la television abierta, que es una puta enferma y codiciosa a la que todos aman.

En resumen, la vida es bella, siempre es bella.

mayo 24, 2009

El Aroma de tu cuerpo

Una multitud de experiencias se agolpan en mi cuerpo,
presurosas, correteadas, quizá a veces contemplativas.

Tantas llamadas que me hace el destino, todo parece una linea trazada.

Y en esta pausa de mi tiempo, no me alcanzan las caídas para renunciarte,me reclama mi sexualidad el aroma que desprende tu cuerpo después de hacerte el amor, de hacerte el amor, de hacerte el amor...

Y no me justifica mi osadía de mujer libre y aventurera, si al final buscaba tu olor, tan sólo el tuyo... que gran fraude la exquisitez del banal sexo, satisfecha y embriagada, ciega en mi éxtasis aun buscaba tu piel quemada para satisfacer mi alma con tu recuerdo.

Yo soy carne y hambre de deseo, sueños de libertad, proclamente y defensora de mi autonomía, fémina segura de su calidad de hembra madura, de niña sexual.

Pero me faltó esta noche tu cuerpo, me falto tu esencia y descubrí que tenía sentido a mis sentidos el registro mental que tengo de tu aroma, ese mapeo que mis ojos le hacen a tu espalda indiferente y dormida, que tú sin saber es víctima de mi olfato.

Anhelaba el júbilo mordaz y sereno con que se satisface mi espacio tierno - lo se esa incongruencia que me abrazo el día de mi nacimiento - mi nariz en tu espalda, esa niña interna que se regodea por abrazar a su muñeco... yo me entiendo, yo me entiendo ¿yo me entiendo?

Nuestras noches fugaces, si, rutinarias y progamables, si, monótonas, también, pero con tu cuerpo, tu tan imperfectamente perfecto cuerpo, que tiene huella, que tiene aroma, que tiene esencia... el que yo quiero.

abril 01, 2009

Más alla de la muerte quizá, o Annanda

Hace años descubri la noble bondad de mantener abierta la mente y el alma a la expectativa. Prefiero definirme como un ser lógico, pero a veces en ello hay tanta insesatez y falta de cordura, o peor aun un execeso de ella.

Vengo a agradecer el amor que un 14 de febrero de 2009 me demostró que es capaz de todo, aun de vencer la muerte. Hoy de forma extraña confieso que soy amada a pesar de que mi lazo físico se rompió con un ser amado aun muchos meses antes de conocer su muerte, y me conmueve de forma que me hace sentir niña.

Quiero agradecerte por tanto mi niña, mi Alma, en este espacio, acaso esperando de ello pudieras ser testigo o parte, que sigas al pendiente de mi y que entiendas el dolor que tu muerte me ha dejado, y aunque te agradezco el bello regalo que a mi vida acercaste, con todo te extraño y me sigues doliendo, siempre me dolerás. No sé si eres un ángel o un espíritu que simplemente vela por el bienestar de quienes amó, pero yo he sentido tu amor y el mismo me ha partido porque venció a la muerte.

Gracias por Annanda...